El Parque Regional de Montevecchia y della Valle del Curone cubre una superficie de aproximadamente 2.350 hectáreas, y su territorio abarca diez municipios: 

Cernusco Lombardone, Lomagna, Missaglia, Montevecchia, Olgiate Molgora, Osnago, Perego, Rovagnate, Sirtori, Viganò.

El parque no es una reserva integral pero es un área muy diversificada, donde hay presentes, además de zonas de gran interés ambiental, también centros urbanos, asentamientos productivos, áreas destinadas a la agricultura y a la ganadería, cerca de monumentos arquitectónicos de gran valor artístico; además, el Parque coincide con la extrema franja verde, es decir, con abundantes elementos naturales de la Brianza sudoriental, compenetrándose con la llanura agrícola e industrial, al borde de los últimos brotes de conurbación metropolitana milanesa.

En el interior del Parco di Montevecchia e della Valle del Curone se han reconstruido tres hábitats de interés comunitario prioritario: las resugercias, los pastos y los bosques hidrófilos.

La Brianza, tierra en otra época cubierta de densos bosques, estaba caracterizada por la abundancia de la fauna silvestre, hoy los verdes bosques han cedido a menudo el puesto a los pueblos, las carreteras, los complejos industriales y las zonas cultivadas: la fauna ahora presente en el territorio del Parco ha encontrado una garantía de supervivencia en la institución del área protegida.

El Parco de Montevecchia, pequeña joya a refugio de la metrópoli milanesa, incluye ahora espacios verdes y bosques con abundantes especies de flores bastante valiosas. Los bosques cubren la mayor parte del territorio del Parque. El complejo arbolado Valle del Curone - Valle Santa Croce - Viganò, representa la última superficie forestal de considerables dimensiones en continuidad con las formaciones de bosques de los relieves pre-alpinos. Esta continuidad está de hecho interrumpida, hacia el norte, por carreteras y poblados de modesta dimensión, de manera que no se impida la conexión entre los censos forestales.

La cresta  della collina di Montevecchia, donde se unen los bosques del Valle del Curone y del Valle Santa Croce, representa el "corazón verde" de este Parque nacido para proteger los valores naturalísticos y paisajísticos de este territorio dentro de una Brianza muy urbanizada.