Lugares y Vías de la Fe es una propuesta única e innovadora: una serie de rutas que le harán vivir un verdadero camino interior espiritual.

La ruta comienza en el Palazzo delle Paure (Palacio de los miedos), en Lecco, donde se puede encontrar la información de toda la ruta, accesible a través de un tótem digital. El edificio, construido entre 1902 y 1905, fue la sede hasta 1964 de la Autoridad Financiera, el Registro de la Propiedad y la Aduana, por lo que se le dio el apelativo de los Miedos. Construido en un estilo neo-medieval ecléctico, hoy alberga las exposiciones temporales, la Galería Municipal de Arte - sección de Arte Contemporáneo del Si.M.U.L. y el Observatorio de Alpinismo de Lecco.

La ruta toca algunos puntos significativos del territorio (Calolziocorte, Civate, Cassago Brianza, Abbadia Lariana, Perledo, Dervio, Vestreno, Corenno Plinio y Colico) desde los cuales salen varios itinerarios que permiten el descubrimiento de edificios de culto y de las vías del peregrino de Lecco para potenciar el creciente turismo religioso.

El Monasterio de Santa María del Lavello, Calolziocorte, uno de los monumentos religiosos más importantes del Valle San Martino. Erigido en un lugar de tránsito para la vía somontana que desde Como se dirigía hacia Bérgamo, se convirtió en un destino para peregrinaciones al descubrimiento de una fuente milagrosa. En 1510 los frailes comenzaron la construcción del convento actual. Dentro de la iglesia es posible admirar varios frescos y lienzos, que se remontan a la época de la reconstrucción promovida por los Siervos de María.

Iglesia de S. Giorgio, Mandello del Lario, ubicada a lo largo del Sendero del Viandante, la iglesia se conserva dentro de un espectacular ciclo de frescos de la segunda mitad del siglo XV, centrado en la representación de Cristo Juez, pintado en el arco del triunfo. A su derecha, los justos ascienden al paraíso, y a su izquierda las almas de los condenados son sometidas a las torturas más brutales de los demonios.

La Iglesia de los SS. Gottardo y Colombano, en Arlate, cerca de Calco, son un ejemplo interesante de la arquitectura románica lombarda. Formaba parte, en la antigüedad, de un complejo monástico cluniacense. En la cuenca absidal, antaño totalmente pintada al fresco, se ven los restos del Cristo Pantocrátor (siglo XIII).

La iglesia de Santo Tomás de Canterbury, en Corenno Plinio, cerca de Dervio, fue probablemente construida alrededor del siglo XII. El edificio se encuentra detrás de la muralla del castillo y durante los siglos ha sido objeto de una extensa restauración. Hacia finales del siglo XVII, se construyeron dos capillas y en 1966 se descubrieron varios frescos en las paredes laterales de la nave, que datan del siglo XIV al XVI. Los dos monumentos funerarios, llamados “Arche degli Andreani”, son de enorme valor.

En Dervio, además, está la Iglesia de San Leonardo, en el sugestivo núcleo rural de Castello, cerca de la Torre de Orezia. Documentada desde el siglo XIII, pero probablemente de orígenes más antiguos, la iglesia ha sido remodelada a lo largo de los siglos. Tiene una sencilla fachada a dos aguas y en su interior hay un fresco que representa la Virgen con el Niño y San Giovannino, y, en el altar mayor, un retablo con la Virgen y el Niño, San Leonardo y San Antonio de Padua.

La Iglesia de la Madonna di Bondo, en Vestreno, se encuentra a unos setecientos metros de altura. El edificio actual, que data de 1677, tiene sus cimientos sobre la estructura preexistente de la capilla devocional, construida después de un milagro ocurrido en 1583 en la región de Milán. A lo largo de los siglos, la iglesia se enriqueció con otras decoraciones y mobiliario interior: el altar, la mesa y la balaustrada, en mármol negro de Varenna, se remontan al siglo XVIII, como la construcción del pórtico y la fachada de granito; mientras que a principios del siglo XIX se construyó el campanario.

La antigua Villa Pirovano Visconti se encuentra en Cassago Brianza; de las ruinas de la Villa, demolida en 1963, se creó la “Sala del Peregrino”, el corazón de la futura Ciudadela Agustina.

La iglesia de S. Giorgio, en Annone Brianza, se remonta a la segunda mitad del siglo XV y está flanqueada por un campanario románico. En el interior, el presbiterio se enriquece con un ciclo de frescos renacentistas atribuidos al Maestro de la Pala Sforzesca (retablo). Incluya en su agenda una visita al Monasterio de Santa María del Monte Carmelo en Concenedo di Barzio, donde las monjas Carmelitas Descalzas se dedican a hacer tarjetas con temas religiosos y a la venta de iconos.

La abadía cisterciense de Santa María, en Colico, en la localidad de Piona, se asoma a las orillas del lago de Como, ofreciendo una vista panorámica especial. El complejo tiene raíces muy lejanas, vinculadas a la fundación de un oratorio dedicado a Santa Giustina, y se encuentra entre la arquitectura románica más evocadora de la Lombardía. Hoy en día, los monjes producen licores a base de hierbas y preparados para tisanas según las antiguas recetas del monasterio, utilizando los productos de la huerta y el viñedo local.

La iglesia de S. Antonio di Vezio, en la parroquia de San Martino di Vezio, en Perledo, ubicada cerca del Castillo de Vezio, tiene una fachada de dos aguas y una nave con ábside cuadrangular. En el interior hay frescos visibles, fechados en 1458, con las figuras de los Santos Juan Bautista, Pedro y Antonio Abad. El altar mayor alberga un tríptico del siglo XVI que se atribuyó a Stefano da Pianello.

Por último, no se pierda la Basílica de San Pietro al Monte en Civate. El complejo se encuentra a unos 650 metros de altitud y sólo se puede llegar a pie. Según una leyenda, la fundación de la estructura fue encargada por el rey lombardo Desiderio para reemplazar un edificio de la época anterior. Desde un punto de vista arquitectónico, el edificio presenta la particularidad de tener dos ábsides opuestos, una característica bastante rara en el territorio italiano. Actualmente, el complejo de San Pietro al Monte está registrado en la Lista provisional de la UNESCO para convertirse en Patrimonio de la Humanidad.