El Teatro alla Scala, obra del arquitecto Piermarini, se encuentra donde en una época surgía el Teatro Ducale, voluntad de la Emperatriz Maria Teresa de Austria e inaugurado el 3 agosto de 1778.

El nombre deriva del lugar donde el teatro fue edificado, o sea la iglesia de Santa Maria alla Scala, que aquí estaba construida.

El Teatro alla Scala, lugar representativo del melodramma italiano, ve exhibirse en el curso de los años a Maestros y artistas importantes come Rossini, Donizetti, Bellini y Verdi.
En el Teatro alla Scala se representaron por primera vez las obras más famosas del Ottocento: la Norma di Bellini, l'Otello y el Falstaff de Verdi, la Gioconda de Ponchielli, el Mefistofele de Boito y la Turandot de Puccini.

Reconstruido tras el bombardeo de 1943, fue inaugurado por segunda vez en 1946 con un concierto en directo de Arturo Toscanini, entonces director artístico. Desde 1951, por iniciativa de Victor De Sabata, director artístico en aquel periodo, la Temporada de la Scala se abre el 7 diciembre, día de San Ambrogio, patrón de Milán.
En el palco escénico del Teatro alla Scala se han exhibido: grandes voces, entre ellas Maria Callas, Renata Tebaldi, Giulietta Simionato, Mirella Freni, Mario Del Monaco, Giuseppe Di Stefano, Luciano Pavarotti y Placido Domingo; grandes directores como Luchino Visconti, Franco Zeffirelli, Luca Ronconi y grandes coreógrafos y bailarines como Leonide Massine, George Balanchine, Rudolf Nureyev, Carla Fracci y Luciana Savignano.
Entre enero de 2002 y diciembre de 2004 la Scala se enfrenta a la operación más profunda de restauración del edificio histórico y de modernización del palco escénico, desde finales de la Segunda Guerra Mundial. El 7 diciembre de 2004 Riccardo Muti inaugura la Scala restaurada con Europa riconosciuta de Salieri, la obra que había "bautizado" en 1778.