Apreciado y reconocido oficialmente como una forma de arte, el arte urbano callejero en Lombardía está extraordinariamente extendido.

Al pasear por la ciudad, todo el mundo se topa con verdaderos frescos urbanos realizados por artistas callejeros de renombre internacional. El fenómeno del arte urbano abarca muchas ciudades de Lombardía, como Milán, Brescia o Mantua, y en este año difícil nos da la oportunidad de convertirnos en turistas en nuestras propias casas. 

Descubramos dónde admirar las obras maestras del arte en la carretera, en muchos casos interesantes operaciones de recalificación urbana y al mismo tiempo expresiones de una forma de arte contemporáneo, que han aterrizado hasta en los Uffizi de Florencia con la exposición permanente de la obra Autoritratto de Endless.

¿Grafitis metropolitanos o arte en la ciudad?
El arte callejero engloba todas las manifestaciones artísticas que tienen lugar en los espacios públicos. Se trata principalmente de obras figurativas y gráficas elaboradas, de autor y firmadas (¿quién no conoce las provocadoras obras de Banksy?) que expresan la cultura hip-hop americana de los años 70. 

No tienen nada que ver con el arte del grafiti, aunque sí tienen sus orígenes en él, recordando más a los murales (también un legado artístico de la tradición italiana), y hoy están influenciados por varias disciplinas como la pintura, la gráfica, la fotografía, el diseño o la arquitectura. 

Antes de armarse con botes de pintura y brochas y atacar con entusiasmo una pared recién enlucida, debes saber que la ley tipifica como delito trabajar sin permiso. La ciudad puede convertirse en un escenario libre para hacerse famoso, pero hay normas, incluso virtuosas, como en Milán.

Arte público, las murallas pintadas de Milán
Milán alberga una de las tres escuelas históricas de arte callejero de Italia y la ciudad es rica en obras: frescos, instalaciones e incluso esculturas creadas espontáneamente o por encargo de artistas y colectivos. Así, el Ayuntamiento de Milán ha abierto una oficina dedicada al arte callejero, que se completa con un mapa para identificar 100 muros libres en 70 zonas de la ciudad y proponer proyectos. 

En Milán también se ha creado el Maua, un Museo de Arte Urbano Aumentado difuso y participativo: cualquier persona puede explorar los barrios de Milán, Palermo y Turín y transformar las imágenes tomadas con un smartphone en obras de arte digital animadas en realidad aumentada en la página web.

En Milán, entre murales históricos y novedades 
El histórico barrio de Ortica de Milán es un auténtico museo al aire libre gracias al proyecto Or.Me, Ortica Memoria, del colectivo Orticanoodles: 20 murales cuentan la historia del siglo XX italiano y sus protagonistas. Todos son dignas de ver, pero el que más colorea las grises calles de la ciudad es Gli Orti dell'Ortica. No muy lejos, en Via Viotti, en Lambrate, está Anthropoceano, el mural ecológico devorador de smog pintado por Iena Cruz con pinturas que reducen los contaminantes del aire.

Zed1 firma el famoso CuciMilano en Via Benaco: un homenaje a la multiculturalidad de Milán, representando a una costurera china que cose las banderas de todos los pueblos presentes en la ciudad. En el Giardino delle Culture, en Via Morosini, Millo es el autor del bello díptico en blanco y negro en el que brota el rojo de los corazones Lost and Found. Y en el Hangar Bicocca, el primer mural italiano de los artistas brasileños Os Gemeos: Efêmero, un chico colgado de un vagón de metro, con sudadera y mochila, está listo para saltar.