El Parque del Oglio Norte es un oasis de paz y naturaleza, que comprende la parte alta del río Oglio, nada más salir del Lago de Iseo. El territorio es principalmente agrícola y encuentran espacio bosques y espejos de agua con su vegetación típica.

La llanura está ocupada por hileras y arbustos, caminos y senderos, y salpicada de casas rurales. En el valle fluvial, donde se encuentra con el curso del Oglio, el río está flanqueado por lechos de grava que pone de manifiesto su recorrido irregular. Entre las especies vegetales presentes en el parque, dominan los grandes árboles como el arce, el carpe blanco, el castaño, el aliso, el chopo blanco y negro, el roble, la robinia, el sauce y la caña común.

Aventurándote en el parque podrás encontrar especies de fauna como el moscardino, el lirón, el erizo, el topo, la liebre, conejo silvestre, la rana y el sapo. Además es posible ver a animales más raros como la comadreja, la garduña, el tejón y el forro. También es muy rica la fauna avícola: la garceta, la garza real, el mochuelo, el búho, la focha, la gaviota, el mirlo, el pájaro carpintero, la golondrina.

En la zona central del Parque del Oglio Norte se encuentran siete Reservas Naturales, importantes por la presencia de especies botánicas y faunísticas de gran interés naturalista y medioambiental: Boschetto della Cascina Campagna, Bosco de l’Isola, Bosco della Marisca, Isola Uccellanda, Lanche di Azzanello, Lanca di Gabbioneta.

De gran interés son los municipios que se asoman al río con testimonios histórico-arquitectónicos, como el bien conservado Castillo de Pumenengo, con sus torres y su característico patio, y las ruinas de los castillos de Paratico y Roccafranca.